Poder Mental para Timidez
Se piensa que la timidez es parte del temperamento de muchas personas y que no puede ser modificado. Nuestra experiencia personal y con mis consultantes ha evidenciado que es posible superarlo. De una persona introvertida, insegura y muy tímida, al poco tiempo puede uno transformarse en una persona extrovertida y segura.
La posible tendencia innata a la timidez o introversión pasa a ser algo positivo y atractivo, ya que evita las actitudes soberbias o displicentes. Se puede tener fácilmente una mayor empatía y respeto a los demás. Esta combinación resulta muy favorable en las relaciones humanas.
Toda persona nace con las condiciones necesarias para relacionarse con los demás y comportarse con seguridad. El ser humano es sociable por naturaleza.
La repetición constante de las frases adecuadas va construyendo nuevas imágenes en la mente, las que a su vez, se transforman en nuevas órdenes de comportamiento automático.
Aunque puede ser cierto que las personas que son introvertidas por naturaleza no lograrán alcanzar un comportamiento sumamente extrovertido, si es posible tener un nivel de equilibrio emocional y lograr convivir exitosamente en sociedad con soltura y seguridad en sí.
¿Cómo puedes enfrentar tus miedos más fácilmente? Analizándolos para que veas que en realidad son inofensivos. La fobia social y la timidez se reduce a miedos irracionales como:
*Vergüenza de ser el centro de atención en un grupo.
*Miedo a ser observados detenidamente ya que creemos que nos están
analizando y criticando.
*Nerviosismo en las entrevistas de trabajo o situaciones de negocios.
*Miedo de hablar en público o en un grupo íntimo de amigos.
*Incapacidad de hacer un reclamo o solicitar un aumento de sueldo.
*Dificultad para platicar en reuniones o fiestas.
La mayoría de todos estos miedos infundados se pueden enfrentar y vencer si haces un análisis detallado de ellos para convencerte de que no hay nada que temer y aun si hicieras el ridículo o dijeras un comentario tonto, seguirás viviendo. De modo que esas situaciones no son tan peligrosas como creías pues no ponen en peligro tu vida. Así que ¿a quién le importa?