Hay miles de científicos en todo el mundo, de diversas especialidades, que estudian la calidad de vida y la longevidad en la especie humana. Sus conclusiones son ya sólidas y abundantes.
El ser humano puede vivir muchos más años que el promedio actual. Se piensa que puede vivir 120 o 140 años.
Se sabe cuáles son las causas que impiden esta vida más larga. También se considera que una persona puede empezar a cualquier edad un plan para mejorar y alargar su vida.
Quizás consideremos que 140 años es una cifra muy optimista. Sin embargo, lo que podemos asegurar es que cambiando los hábitos tal como se indican, tendrás una vida más larga y, sobre todo, de mejor calidad.
Investigando desde 1980 sobre calidad de vida humana me han permitido reunir una gran cantidad de experiencia, con decenas de colaboradores de diversas especialidades y con miles de alumnos. Con muchos de mis estudiantes mantengo un seguimiento semana a semana por muchos años mediante el sistema de Mentoring y he podido apreciar su tangible y rápido progreso en su calidad de vida, en todos los ambientes en que se desenvuelven.
Mis audiolibros circulan por el mundo desde 1971 habiendo probado en todos estos años su eficacia.
No será difícil cambiar tus hábitos. No tienes que hacer ningún esfuerzo. Apenas debes tener un poquito de voluntad para escuchar la grabación y hacer la sesión. Con eso es suficiente. Tu poderosa mente interior te conducirá gradualmente, sin esfuerzo, sin sacrificios, a que te agrade y disfrutes lo que es bueno para tu salud y para tu vida.
Siempre el subconsciente es el que predomina. Es allí donde se forma el autoconcepto, la autoimagen y los hábitos. Es allí donde se arraigan los temores, prejuicios y condicionamientos. Siempre la consciencia está limitada por la información y la programación del subconsciente. Con mi método, los mensajes llegarán directo a tu fondo mental, cambiando tus hábitos, condicionamientos, prejuicios y programas; eliminando tus temores y liberando todo lo que puedes ser.
No te preocupes si te parece difícil. Con mi método te acercarás cada semana al ideal sin mayor esfuerzo, ni sufrimiento ni privaciones.
Principios a incorporar para tener calidad de vida.
La vida es una sucesión de retos, y los retos, de por sí, son un motivo más para vivirla y disfrutarla. Pero, además, la vida es bella y está llena de detalles que la hacen merecedora de ese disfrute.
Desde la sonrisa de un niño, pasando por la mirada de una mujer (o de un hombre en el caso de las damas), contemplar una flor o percibir su aroma, la mano que nos sostiene cuando vamos a caer, quien se conmueve sinceramente ante nuestro dolor, el disfrute de un libro o una obra de arte, hasta la satisfacción por el trabajo bien realizado, son algunos de los millones de fenómenos con los que contactamos a diario y que hacen que la vida sea un don invaluable del que todos debemos disfrutar y desear prolongar.
Los científicos han calculado que el ser humano puede vivir entre 120 y 140 años. Algunos más optimistas u osados llevan estos años a cifras más elevadas. Sin embargo, vemos que la expectativa de vida máxima alcanzada hasta ahora ha sido menor a estas cifras.
Por otra parte, se pueden contar con los dedos de las manos las personas que han rebasado los 110 años comprobados documentalmente.
Se observa que los adultos mayores cuando rebasan cierto número de años tienen una serie de insuficiencias, limitaciones y padecimientos que reducen en mayor o menor medida el disfrute de la vida, llegando en ocasiones a que ésta se convierta en sufrimiento, dolor y desesperación para estas personas y sus familiares.
Para evitar estas molestias y sufrimientos (generalmente producidos o agravados por los errores cometidos en el proceso que llamamos civilización de la humanidad) se han propuesto y cada día se proponen métodos y acciones que, a pesar del entusiasmo y la esperanza que despiertan, no han logrado su objetivo y después de un tiempo más o menos prolongado caen en el olvido.
Nosotros estamos seguros de que los continuos avances de la ciencia y la técnica contribuirán cada vez más a lograr el objetivo propuesto de una longevidad satisfactoria.
También es fundamental que a estos avances hay que ayudarlos de una forma decisiva con el aporte personal para lograr ese gran objetivo de nuestra vida.
Plantearemos una serie de principios bien establecidos que deben incorporarse conscientemente en nuestro quehacer diario y que son:
1.- Utilizar la mente y su órgano de expresión, el cerebro, ya que es el controlador de todas las actividades del cuerpo humano.
2.- Darse cuenta de que el ser humano es un animal de hábitos.
3.- La importancia de una actitud positiva hacia la vida.
4.- Reconocer que órgano que no se ejercita se atrofia.
5.- Comprender que todos los excesos son dañinos.
6.- Identificar los elementos nocivos a la salud.
7.- Aprender que las transgresiones esporádicas (si no son máximas) se compensan.
8.- Aprovechar las acciones cotidianas al máximo posible.
9.- No autolimitarse ni permitir que nos limiten.
Cómo aprovechar la fuerza de los hábitos
Se requieren cambios de conductas. Hay que modificar el modo cómo se piensa y se actúa.
Hay que cambiar el modo de enfrentar la vida en la rutina diaria e incluso en el modo cómo nos alimentamos. Son conductas conocidas por la mayoría. Sin embargo, cada persona ha asimilado sólo algunas y por un tiempo.
Para vivir más y mejor se requiere incorporar estas nuevas conductas como un programa permanente de vida. ¿Cómo hacerlo sin esfuerzo? Simple: cambiando los hábitos. La fuerza más poderosa de nuestro ser es el hábito. Por eso la gente vive poco y mal, porque tiene malos hábitos y no los puede cambiar, por más voluntad que ponga.
La solución está en reemplazarlos con nuevos hábitos. Una vez que están incorporados, son tanto o más fuertes que los antiguos. Si las ideas apropiadas para la salud entran directo al fondo de la mente, se trasforman en nuevos hábitos. Y nos gustará hacer lo nuevo tanto o más que lo antiguo; lo haremos por tanto sin esfuerzo ni sacrificio. Simplemente nos agradará y entusiasmará. porque tendremos este nuevo programa en la mente. No tienes nada de que preocuparte, simplemente hay que dejar que los mensajes entren al fondo de la mente, mensajes que, por supuesto, tú conoces previamente y aceptas.
Para incorporarlos rápidamente se utilizan la visualización y la repetición, mediante afirmaciones positivas en una modulación y entonación precisas.
Es el método que emplea la mejor publicidad del mundo para convencer a la gente a comprar lo que sea. Solo que en este caso, es una publicidad que tú mismo te haces para tener una nueva vida larga y próspera.
Para los nuevos hábitos te ayudo a visualizar actuando de la nueva forma que deseas y dándote al mismo tiempo afirmaciones positivas y asertivas relacionadas con lo que quieres lograr.
Sergio Valdivia C.